Que vuelvas.

Que vuelvas; eso es todo lo que espero. que regreses con todos los recuerdos que te llevaste denntro de esas enormes y viejas maletas el día que te vi marchar por la puerta. La misma puerta por la que aun espero verte regresar.

¿Qué fue lo que paso?

Te queria (al menos eso creia) y tu me querias (eso decías), me emocionaba al pensar en ti, en tu voz, en tus abrazos, recordar esos ojos claros mirandome con cariño, mirandome como nadie lo habia hecho.
Al estar entre tus brazos me sentia en el cielo,sentía que me protegias de mi misma, eramos solo tú y yo; cuando me mirabas, veía desbordar la miel de tus ojos diciendome lo que tus labios callaban.
¿qué fue lo que pasó? un día tus brazos eran solo cadenas de las que no podía escapar, me sentía atrapada. Tus palabras no eran más que sonidos sin sentido que salían de tu boca, y tus ojos me miraban como a cualquier otra chica, como mis ojos te miran ahora.

Llueve

Llueve. Miro la lluvia del otro lado de la ventana y siento como la tristeza me invade, cada gota me recuerda a ti. Salgo, descalza, sin miedo, sin pena, sin dolor. Cada gota que toma mi piel es una invitación a volver a vivir, a no olvidar que me miras  desde dondequiera que estés.

Sin esperanzas.

Perdió su brillo, toda la magia que guardaba en sus ojos se lavó con sus lágrimas. La alegría que siempre la acompañaba, un día la abandonó. Y asi quedo ella: sola

Sin magia.

Se bebió la magia de mis ojos. Borró la sonrisa de mi rostro. Robó las palabras de mis labios. Perdió el rubor de mis mejillas. rompió la fuerza de mi voluntad. Se comió mi corazón a mordidas.

Dejemoslo así

Te escribo porque soy demasiado cobarde para decirte esto de frente, y porque espero que asi mis palabras 

no suenen tan torpes. Aunque en realidad no sé que es lo que tengo que decirte.

Creo que debo empezar por pedirte que me perdones. Me es tan difícil verte y sentir como, por un momento, mi corazón se detiene. Ver pasar frente a mis ojos la historia que nunca escribimos; lo que nunca será, tragarme los 'Te quiero' que nunca te dije y sonreír para que no sospeches que aun me dueles.

Quizá no lo supiste, pero yo te quise. Te quería de verdad. Anhelaba estar contigo, no te imaginas cuantas veces nos pensé juntos, pero la oportunidad se nos pasó y ahora ya no te quiero, ya no te espero, ya no te creo.

No hay más nada que decir. No te puedo perdonar porque no me hiciste ningún daño; no te puedo olvidar porque nunca estuviste a mi lado.

Me perdí

Me perdí. En un lugar tan negro como la noche, tan frio como el desierto;un lugar que no conocía. En tus ojos me encontré.

Qúedate

Quédate. Prometo que es la ultima vez que te lo digo. Con palabras sinceras te pido que te quedes. Por favor no te vayas, no me dejes en un mundo vacío. Quédate un suspiro mas.

Lo odio.

Lo miro y lo odio. Lo odio porque me alejó de él, porque al verlo reconozco la sonrisa que me abandonó, veo mis sueños destrozados. Lo odio porque es un recordatorio constante de mi odio hacia mi misma, de lo estúpida que fui. Lo miro, lo odio y reconozco a su padre.

Vestida de azul

Siempre la recordaré así: vestida de azul. Como el día que la conocí y por primera vez vi esos deslumbrantes ojos negros llenos de vida.Estaba perdida al igual que yo, en un mundo donde crees conocer a las personas, buscando sus sueños en cualquier rincón de este lugar.
No recuerdo haberla visto triste,¿cómo iba a saber lo que en verdad pasaba con ella si siempre la encontraba con una sonrisa en el rostro?
 Pensaré en ella al mirar el cielo; de día azul como sus vestidos, y de noche negro como sus ojos.

Por eso es tan  difícil verla así ahora, verla por última vez vestida de azul y sus ojos cerrados para siempre.

Hijo de soldado

El soldado marcha detrás de su comandante, orgulloso de portar su rifle y dispuesto a dar la vida por su patria, sabiendo que no tiene nada que perder pues perdió a su familia en una batalla por su libertad y a la única a quien había amado se fue sin razón aparente.Pero él no sabe que a lo lejos alguien  observa atentamente a los soldados alejarse, preguntándose cual de ellos es el hombre, que se va sin saber que hay un niño que espera ansioso a su regreso para poder decir con orgullo que su padre regresó victorioso de la guerra.

Una nueva realidad.

Te invito olvidarnos de el pasado,a construir otro mundo, una nueva realidad solo para nosotros donde no haya temores, tristeza ni soledad, un mundo hecho de ilusiones y esperanzas. Hagamos un mundo de sueños de tinta y papel.

Ella no lo amaba.

Ella nunca lo amó. Ni siquiera lo quiso.Pero lo extrañaba como a ningún otro;solo quería estar con él. Escuchar su voz llena de misterio al contarle alguna de las tantas historias que nadie contaba como él. Necesitaba volver a ver esos eternos ojos negros de los que huía para no perderse en ellos. Necesitaba estar entre sus brazos para olvidarse de todo, para cerrar los ojos y solamente escuchar su respiración, escuchar los latidos de su corazón. Las calles estaban vacías si él no las llenaba con sus pasos, si él no caminaba a su lado. El aire la sofocaba si no estaba impregnado con su olor.La vida no era vida desde que se fue. Ella no lo amaba, ni siquiera lo quería.

Estar contigo.

Yo no sé si te quería, si te quiero o si te voy a querer; solo sé que me gusta estar contigo, que me gusta hablar contigo porque me escuchas, porque me gusta escucharte. Porque no me da miedo decirte la verdad, no me da miedo que me puedas lastimar, me da miedo que no pienses en mi como yo pienso en ti.

Y duele el silencio, el silencio que se convierte en distancia aun estando tan cerca. Duele no poder sentir sus brazos, no poder escucharte, no poder decirte que quiero estar contigo, tan solo estar contigo.Para no sentirme tan sola.

Encuentro fortuito

Sept-7-2011

Hoy, la vi. Supe que era ella porque tenía los ojos de su madre y el cabello rebelde como el mío. Ella, naturalmente no me reconoció pues aun era muy pequeña cuando…cuando las deje de ver: a ella y a su madre. Y hoy, después de tantos años la he encontrado. Al principio no estaba seguro de que en realidad fuera ella y me atreví a preguntarle su edad -Dieciséis- contesto, confirmando mis sospechas. Debe ser ella- pensé; después sonrió y se marcho, llevándose con ella la oportunidad de conocer a quien alguna vez escuche llamarme “papá”.